VERDADES 2

“Dios no existe, jamás ha existido, ni existirá”

Ya antes de que los judíos se inventasen a su Dios Jehová, o Yahvé, que es a partir del cual los católicos diseñaron su actual Dios, Platón, que era sabio nos decía esto:

“Los dioses no existen, tan solo son seres poderosos venidos de los mundos lejanos de fuera de la Tierra. El conocimiento de estos hechos y su intervención en la evolución del hombre nos hacen libres del miedo que tenéis a sus servidores.

Lo peor que le ha sucedido a la Raza Humana, ha sido caer en manos de estos servidores, los fanáticos religiosos que, a través del engaño, el miedo y la coacción, tal y como ya nos avisaba Platón, han intervenido en la evolución del hombre, convirtiéndolo en un ser mezquino y ruin, capaz de las mayores atrocidades y aberraciones por Inspiración Divina. La maldad le ha sido inoculada al ser humano a través de los dioses y sus religiones, en su nombre se ha matado, torturado, violado, saqueado y aniquilado razas enteras “Por el Amor a Dios”… por el amor a un dios que no era más que un ser “poderoso” y que por más vergüenza, se trataba de un tal YVHW, que fue extraditado desde su “Mundo lejano de afuera de La Tierra” y mandado aquí como castigo por sus delitos, tal y como nos cuentan Las Tablillas Sumerias, escritas miles de años antes de que Dios crease “Los Cielos y La Tierra”.

  Resulta mucho más fácil creer que discernir, por esta razón hay tantos creyentes sometidos por la “Fe Ciega” … y es que nadie es capaz de abrir los ojos y discernir, aceptaría la existencia de un Dios tan ignorante que, entre otras estupideces, creo “Los Cielos y la Tierra” en 6 días y uno de descanso, un dios vago que se cansa y busca darse un momento de descanso.

Así describe La Biblia La Tierra, por esta razón cuando Satanás subió donde Jesús a la montaña más alta para tentarle, pudo observar desde ella, Todos los Reinos de La Tierra…plana, por supuesto. Todo el mundo sabe, menos Dios, que en la Tierra es imposible ver todos los reinos, algunos siempre quedaran en el hemisferio opuesto.

Estos son los “Inescrutables Caminos del Señor”, donde los creyentes guardan su ignorancia; todos los demás ya podemos andar por caminos mucho más comprensibles, incluso ciertos.